El síndrome del diente fracturado

Las piezas dentales presentan en ocasiones pequeñas fisuras o grietas que son difíciles de detectar, especialmente cuando se encuentran bajo las encías. Estas grietas provocan en el paciente una sintomatología conocida como el síndrome del diente fracturado.

Síndrome del diente fracturado

Las personas que sufren el síndrome del diente fracturado suelen experimentar un dolor agudo al masticar ciertos alimentos y en ocasiones sensibilidad extrema al frío. Por lo general no se trata de un dolor constante, a diferencia de las caries o los abscesos. Sin embargo, dependiendo de la amplitud y posición de la grieta, los síntomas pueden ser muy variados, y con frecuencia las fisuras no son detectables a través de radiografías, dificultando el diagnóstico y pudiendo conducir a la elección de tratamientos equivocados. Además, muchos de los casos se refieren a piezas que no presentan caries ni tratamientos de restauración previos.

El síndrome del diente fracturado se da con más frecuencia en los dientes posteriores, que son los que soportan mayores presiones en la masticación. Los más propensos a presentar una fractura son los molares inferiores aunque las grietas pueden presentarse en cualquier otra pieza dental.

Además de otros factores como una deficiente posición de las piezas molares y un excesivo contacto en la masticación, la tendencia a rechinar o apretar los dientes, ya sea continuamente o sólo al dormir (bruxismo), produce una mayor propensión a padecer este síndrome. Por otro lado, las piezas con grandes rellenos pueden también quebrarse con mayor facilidad.

Los pacientes que sufren el síndrome del diente fracturado suelen estar en el rango comprendido entre los 30 y los 55 años y las personas que lo han padecido anteriormente presentan, sin duda, un mayor riesgo de encontrarse de nuevo con grietas en otras piezas dentales.

Ante la aparición de los primeros síntomas es muy importante acudir inmediatamente al odontólogo, ya que si una grieta o fisura aumenta de tamaño puede hacer que se rompa el diente, provocando frecuentemente infecciones y fístulas en las encías de los dientes fracturados. Es habitual que el paciente, ante un dolor que sólo se presenta ocasionalmente, aguante durante meses antes de ir al dentista.

Diagnóstico del síndrome del diente fracturado

Este síndrome no es una dolencia fácil de diagnosticar. Los rayos-x no son por lo general determinantes en la detección de las grietas y el odontólogo deberá utilizar pruebas de mordida, tintes o luces especiales para encontrarlas. Por otro lado los tratamientos son muy variados dependiendo de la tipología y posición de las fisuras. A veces se podrá fijar el diente con una corona y otras veces será necesario un tratamiento en el canal de la raíz. En ocasiones se necesitará conductos radiculares para tratarlo, haciendo que la pieza pierda sensibilidad, y en los caso más graves que afecten a la raíz, no habrá más remedio que la extracción de la pieza, reemplazándola por un puente o un implante.

El síndrome del diente fracturado tiene una incidencia creciente en nuestra sociedad, y la especial dificultad de su diagnóstico y sus variados tratamientos lo convierten en un tema de creciente interés en la odontología contemporánea. Si presenta síntomas que puedan asociarse al síndrome del diente fracturado, no dude en consultar su caso en Centro Odontológico Doctor Puchol.

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